lunes, julio 16, 2007

Peloponeando por siempre...

Poner punto final es un decir, porque todo queda para siempre, las emociones, las anécdotas, los sueños, todo. Llegará un momento en la vida en que tendremos tiempo de mirar para atrás y sacar la cuenta de las cosas buenas y malas que hicimos. Por mi parte yo soy un trotavidas, pase por esta, pase por aquella, y tuve la suerte de conocer un medio tan expresivo como este espacio para escribir algo de lo que llegaba a mi cabeza. Aquí, y valga la confesión, conocí mucha gente de otros países a quien le di todo mi corazón sincero, y aquí también, quedó ese sentir para siempre. Tuve algunos días para meditar mi retirada, pero creo que todo tiene un final, con rumbos nuevos, con una maleta en el hombro lleno de cortes por las experiencias vividas sin pedirlas y mirando siempre al horizonte. Sé, que algunas personas que pasaron por esta página se pudieron sentir identificados por algo que escribí y se tambien que yo también goce y me divertí mucho y hasta suspiré en los momentos en que vi otras páginas. Aquí publiqué poesías, algunos cuentos, y parte de mis experiencias desde el 25 de noviembre del 2005 hasta ahora, 17 de julio del 2007. ...mucho tiempo ya...

Bueno, los quiero montones, aquí queda Pelo-pon-eso para siempre, pueden ver todos los post por archivos...

Y para todos aquellos que aún creen en los sueños sigan adelante, no decaigan. Ustedes son los que cambiarán el mundo. Eso ni que decir. Sean auténticos y nunca mientan en su vida,a nadie, eso es lo más profundo que les puedo dejar.

Cuídense.

Joan y su Pelo-pon-eso...que siempre estará con ustedes...nunca se irá.

viernes, julio 13, 2007

El karma de los caracoles



De vez en cuando parece que los caracoles salen al encuentro de tu zapatilla, o que, adoctrinados en vivir sólo por un tiempo, se lanzan al vacío y a ese ¡crack! nefasto que se da cuando uno pisa su caparazón y terminan hecha una melcocha. Reiteradas veces, aunque no muchas, he pisado un caracol. Y el sentimiento que viene a tu mente es de autodesprecio, de compación por el ser desvalido. Te sientes como un gigante que mata a los enanos. Luego levantas la zapatilla o el zapato y vez como el caracol aplastado se estira como queso de pizza. Más de una vez alguien se habrá sentido tan culpable que cambió su vida. Dejo las drogas o se dedicó al altruísmo aunque nunca supo porqué, sólo que hizo algo que no debió.

Hace semanas que no piso uno, por más que llego en la noche y no se puede apreciar la acera. Garúa a menudo por las calles y pensando que están en la continuación del jardín, los caracoles avanzan rastreando con sus antenitas el recorrido pero en muy pocas oportunidades llegan a su destino. Hoy al levantarme abrí la puerta de mi casa y vi uno que trató de cruzar al otro lado del jardín. Estaba aplastado y el resto de lo que fue una lluvia lo cubría como en una piscina.

Creo que fue ayer, o antes de ayer, que me fije en la acera al llegar a mi casa. Fue algo casual, pero al bajar la vista aprecié un caracol tratando de cruzar. No había nadie más que yo en la calle. El frío es tan fuerte que hace que la gente no salga, y al verlo, decidido de pasar al otro lado y teniendo en su futuro mi zapatilla como sepulcro, cambié su destino. Me agaché y lo levanté, en homenaje a los otros caracoles que murieron avanzando. Me volví por unos minutos su cómplice, su amigo, vi sus antenitas como poco a poco iban ingresando a su cubierta volviéndose una especie de bolita y sin pensarlo lo lleve al otro extremo del jardín. Lo puse encima de una piedra para que con su baba pueda aferrarse y antes de entrar a mi casa vi como las sacaba nuevamente y rastreaba el lugar.

El caracol estaba inmóvil, sobreviviente de mi zapatilla, viendo el mundo otra vez y sabiendo que tenía más vida que la que su destino le ofrecía. Supongo que un caracol debe sentirse raro al verse como un gato, con más vida, al sentirse inmortal o logevo.

Supongo que allí, entre la cima de aquella piedra y viendo el jardín mojado, el caracol se sentiría un Dios entre los de su raza, el orgullo de los de su generación, el que puede dominar el mundo, con su Karma, lejos de las zapatillas de los hombres.

lunes, julio 09, 2007

Hoy me quedé en casa, el clima y mis deseos de ensimismarme me obligaron a hacerlo. Pensar y reemprender todo otra vez, tener las metas claras y llenarte de entusiasmo son cosas necesarias para poder seguir. Como siempre, todo en la semana es tranquilo cuando estas en tu espacio, tienes tiempo para descansar, leer algunos libros, poder pensar y escribir. Terminé de leer un libro que estaba estancado hace unos meses en mi librero, haciendo equilibrio junto a otros papeles, y me mantuve con la luz apagada un buen rato.
Veía mi cuarto, veía las paredes, veía mi tiempo. Los recuerdos aún vivos regresaban, y pensar que hace tan poco tenía 20 y hacía teatro. Escuché en mi mente los ladridos de mis perros, llegue a tener hasta 6 y vivía saliendo con todos ellos e impidiendo que se pelearan. Quise algo de hielo, amanecí un poco decaído por la salud pero para la noche llegué más fortalecido. Necesitaba descansar, eso era, todo el día fuera de casa y poco tiempo de sueño cansa a uno.
El silencio siempre es un buen conversador, te dice cosas maravillosas cuando necesitas hablar con ella. Todos cometemos errores, todos nos caemos, todos nos levantamos, y ella está ahí dándote consejos, ayudando a que todo salga en orden. Subí las escaleras empinadas del segundo piso de mi casa, estan ahí pero no tengo tiempo de subir, lo hice el sábado pasado para ver el partido de Perú con mi hermano pero en la semana me quedo abajo, en mi cuarto.
Hace tiempo que no entraba por la puerta de la algarabía, aquella donde abría la manija y veía salir a mi perros ladrando. Los hacía a un lado porque bajaban como estampida, alegrando la casa mientras yo cuidaba de que no se orinen en los muebles ni se peleen entre ellos. Pero hoy que subí no escuché ruído. El patio, donde tambien se cuelga la ropa estaba con la puerta cerrada y la luz apagada.
Por una rendija pude meter mi mano e ingresé. Los recuerdos revivieron como el ave Fenix. Allí, en esa casa de madera avandonada donde vivían hay una reja pintada por mis sobrinos que dice "clausurado". El dolor de su partida fue muy fuerte. Mi negrita Brownie se fue, tantas cosas que pasamos con ella, un ladrido menos, y mi perro Bronco tambien nos dejó, ya tenían más de 17 años.
Mi pecoso, el saltarín y más peleador tuvo por la edad un problema en la columna y ahora, como no puede subir las escaleras, duerme abajo a los pies de mi cama y sale sin hacer esfuerzo. Es un abuelito muy tranquilo. Ahora el patio de arriba quedo sólo, las revistas viejas las había botado mi madre en el tiempo en que no subí y tambien se deciso de juguetes y adornos antiguos. Los estantes estaban caídos y el silencio esta vez no me habló. Me agaché como en los viejos tiempos para ver dentro de la casa de mis animales, antes y durante la época de la enfermedad de ellos, yo me sentaba junto a la puerta y hacía que mis perritos, uno a uno, se recuesten en mis brazos. Era una alegría cuando se curaban ya que un animalito es parte de la casa.
Pero esta vez no vi nada, sólo sus recipientes para que tomen agua uno encima de otro, como vestigios de que hubo vida allí y el techo maltrecho de su casa de madera que costo subirla al patio. Fue una alegría cuando la conseguimos, una casa grande para mis perritos no tan grandes. Ese recuerdo aún está bien claro.
La noche llego, el frío cala los huesos y veo todo en silencio. Han pasado muchos años y sin querer estoy nuevamente aquí, testigo de esa película donde participe, esa película de vida que cada quien pasa y a cada quien marca. Mi familia va avanzando conmigo, mis sobrinos crecen, las alegrías se acercan como pequeños globos que se inflan de vez en cuando, y los recuerdos quedan en la mente.
Traté de no dejarme llevar por tristeza, quise hacerlo pero preferí escribir, este es el medio para darme a entender a mi mismo, para ordenarme, para seguir. Las cosas van marcando su rumbo, los ladrinos son silencio que resume todo, mi vida se vuelve más clara, y el peso de las vivencias hacen que mis labios se cierren por hoy. La algarabía es un buen medio para distraerse de lo que vendrá y seguir avanzando con el peso de lo inevitable al lado tuyo es lo más recomendable, sin olvidarse nunca que existen estos tiempos de reflexión. Pronto, el silencio también será parte mío. Espero estar lúcido para cuando llegue.

sábado, julio 07, 2007

Realmente maravillado por la elección de Macchu Picchu como maravilla del mundo, es un lugar precioso que tienen que visitar, ese es más que motivo para estar orgullosísimo siempre de ser Peruano...y además cada vez más sorprendido de la música del grupo nectar, ayer estuve en un lugar folklorico y el homenaje fue grandísimo, entre peruanos y extranjeros. Es un buen tiempo para Perú y tenemos que sentirnos orgullosos por eso.

!arriba Perú!

viernes, julio 06, 2007

soy de los que aún podemos escribir saliendo de la nube, viendo todo desde arriba y pensando que aquello es un colchón de dulce. Trato de andar sin resolvae tantas cosas que a veces me da por resolver, como por ejemplo, !porque michi hay tuneros cantándo por la calle de la pizzas cuando esta jugando Perú y mejor cae música negra o criolla!, !porque en un local brasilero estan celebrando bailando Samba un gol de perú! o sino porque me siento tan bien escuchando a un brother de chincha que entra a la combi y toca sólo cajón e invita a todos a bailar. No quiero resolver nada, creo que no sería justo porque por algo se dan las cosas pero hay cosas medio ilógicas que se dan, eso nomás, ahora me ire a tirar richi rey...osea a almorzar

martes, julio 03, 2007

Es tan de mañana que las palabras se congelan en el silencio de los suspiros, hay un vacío, como aquellos que suceden cuando diste todo el esfuerzo y quieres descansar, el reloj no para, las caras indiferentes me rodean y los lapicieros no quieren escribir más. "Hasta eso pasará" es una frase que decía mi abuelo, y es cieto, todo pasa en la vida, todo cambia, y los sueños se hacen realidad si tu persistes en lograrlos. Mañana quizas será distinto pero hoy es hoy, y no se como durarán las secuencias. No deseo hablar, sólo hacer y luego ir a meterme dentro de la cama y olvidarme del mundo, es el frío quizas, o simplemente el vacío de hoy. Sólo tus palabras me pueden reactivar. Eso es lo más seguro.

domingo, julio 01, 2007

Quien como algunos que lograron ganar dinero de sus pensamientos, es lo que todos quisieramos y por lo que algunos luchamos para poder salir de la ruleta que significa pensar para otros y ser libre por siempre ¿que bueno no?. Sería algo excelenten si todo fuera como lo planeamos